Más de diez mil personas desplazadas en los últimos días por las inundaciones en la región de Emilia-Romaña, en Italia, han podido volver a sus casas, mientras continúan las labores de limpieza y el control de corrimientos de tierra, lo que más preocupa ahora.
La cifra los desplazados actualmente es de 26.000, mientras que ayer sábado superaban los 36.600, aunque prosigue hasta mañana la “alerta roja” en toda la región. El último reporte oficial mantiene en 14 las víctimas mortales confirmadas.
La mayor parte de los desplazados son de la provincia de Ravenna (19.500), la más afectada, mientras que otros 4.918 son de Forlì-Cesena y 1.906 de Boloña. Más de 5.300 personas siguen siendo acogidas en instalaciones de la Protección Civil, escuelas y polideportivos, mientras que el resto han encontrado alojamientos alternativos en segundas viviendas o casas de familiares o amigos, según la misma fuente.
La Protección Civil informó hoy de que todavía hay 43 municipios inundados y unos 305 corrimientos afectan a 54 pueblos.
El desastre desatado el pasado miércoles ha provocado daños cifrados en “miles de millones de euros” por las autoridades regionales, ha destrozado numerosas infraestructuras y este domingo mantenía cerradas 622 carreteras.
Discussion about this post